🎭 Sembrando Vida… y cosechando esclavos
Hoy les traigo una fábula moderna sobre cómo se siembra la esperanza con contratos trimestrales, se riega con extorsión, y se cosecha con aplausos forzados en el Zócalo.
¿Recuerdan cuando Claudia Sheinbaum quiso obligar a Uber y Didi a registrar a sus choferes en el IMSS? Qué gesto tan humanista. Pues resulta que en su propio programa social, Sembrando Vida, los llamados “técnicos” son contratados cada tres meses, como si fueran plantas de temporada. Así evitan que crezca la antigüedad, y como están por honorarios, tampoco florece la seguridad social. No hay IMSS, no hay derechos, pero sí hay boletos.
Sí, boletos. Porque siguiendo el manual de operaciones de la 4T, ahora los trabajadores deben vender cuatro boletos por cabeza para llenar el primer grito de Independencia que dará la doctora el 15 de septiembre. Antes eran rifas de autos, luego bailes populares… hoy, Lotería Nacional. ¿Y el premio? La ilusión de que esto no es fraude.
Hagamos cuentas: 24 estados integran el programa. Si cada uno tiene entre 500 y 800 técnicos, y cada técnico debe vender cuatro boletos… ¿cuánto se recauda en nombre del patriotismo? Spoiler: no es para sembrar árboles.
Y como si no bastara con precarizar, extorsionar y disfrazar el abuso de “movilización popular”, también deben llenar el Zócalo. Porque nada dice “poder con humildad” como obligar a tus empleados a corear tu nombre mientras pagan por boletos que no pidieron.
Aquí les dejo el boleto que ya circula entre los trabajadores. Si no lo venden, lo pagan. Si lo pagan, lo callan. Y si lo callan, lo celebran.
¿Esto es honestidad? ¿Esto es humanismo?
@Claudiashein, ¿esto es Sembrando Vida o sembrando clientelismo?
