Sucedió en San Luis Potosí, cuando una pequeña de tres años fue dada por muerta, luego de ser ingresada al Hospital Comunitario del municipio de Salinas por presentar vómito y diarrea.
El cuerpo de la menor les fue entregado a sus padres, junto a un certificado de defunción, el cual estableció como causa de muerte una deshidratación severa y diarrea aguda.
No obstante, al estar en el velorio, la mamá de la niña detectó que presentaba signos vitales, por lo que la llevaron de nueva cuenta a urgencias del centro Comunitario, de ahí fue remitida al Hospital Central en la capital de San Luis Potosí, pero ella murió durante el trayecto.
En el segundo certificado de defunción se informó que murió por edema cerebral, falla metabólica y deshidratación.
La Fiscalía de San Luis Potosí ya investiga la muerte de la menor, y ha solicitado la autopsia para abrir el caso e investigar un presunto caso de negligencia médica.
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